Por el derecho a ser padres y madres presentes

Aquí no se trata de ganar o perder, sino de encontrar soluciones que prioricen el bienestar infantil y el derecho de los niños a crecer con ambos padres. Nuestro compromiso es firme: ofrecer asesoría legal, acompañamiento emocional y un espacio donde la reunificación familiar sea posible.

En Procúrame, creemos que ningún padre o madre debería ser privado del derecho de criar, amar y acompañar a sus hijos. Nacimos para ser una voz, un refugio y una comunidad de apoyo para quienes buscan justicia en un sistema que muchas veces parece ignorarlos.

Aquí no se trata de ganar o perder, sino de encontrar soluciones que prioricen el bienestar infantil y el derecho de los niños a crecer con ambos padres. Nuestro compromiso es firme: ofrecer asesoría legal, acompañamiento emocional y un espacio donde la reunificación familiar sea posible.

Juntos, trabajamos por un futuro donde ningún padre o madre sea apartado injustamente de la vida de sus hijos. Porque ser mamá y papá no es un privilegio, es un derecho.

En México, miles de padres y madres se enfrentan a un sistema judicial que, en lugar de proteger los derechos de todos los involucrados, en muchas ocasiones termina separándolos de sus hijos. Los procesos de divorcio y custodia suelen ser largos, costosos y emocionalmente desgastantes, generando un ambiente de incertidumbre e injusticia para las familias.

«No deberías necesitar un abogado para ver a tus hijos.»

En muchos casos, las decisiones judiciales no reflejan una verdadera equidad, dejando a un progenitor en desventaja y afectando directamente a los menores, quienes tienen derecho a crecer con la presencia activa de ambos padres. La burocracia, la falta de sensibilidad en los procesos y los vacíos legales contribuyen a que estas disputas se conviertan en una batalla que no solo perjudica a los adultos, sino que impacta de manera profunda en el bienestar emocional y psicológico de los niños.

Es fundamental impulsar reformas que garanticen procesos más justos y accesibles, priorizando siempre el interés superior del menor y asegurando que ningún niño sea privado del amor, la guía y el cuidado de ambos padres.